Nuestra socia directora Isabel Winkels resume en este interesante artículo la evolución del permiso de paternidad y la incidencia del mismo en la brecha laboral entre hombres y mujeres.
Así, a lo largo de los años hemos visto como este permiso ha ido aumentando de la siguiente forma:
- hasta el año 2007: era de 2 días;
- en 2007: se incrementó a 15 días;
- en 2017: se amplió a 4 semanas;
- en 2018: 5 semanas;
- en 2019: 8 semanas;
- en 2020: 12 semanas;
- en 2021: 16 semanas, igual que la mujer.
Mientras que el permiso de maternidad se mantiene en 16 semanas desde 1989.
Nuestra socia directora habla en este artículo sobre la incidencia de esta diferencia temporal en los permisos de paternidad y maternidad a la hora de encontrar un trabajo o a la hora de romper el tan conocido techo de cristal para el género femenino en el mundo de los altos directivos.
No obstante, con esta igualdad temporal recién implantada el pasado enero del año en curso, se persigue que el hecho de ser mujer y madre no sea un impedimento para el desarrollo laboral, debiendo tenerse en cuenta que ser hombre y padre hoy en día, implica exactamente lo mismo.
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